jueves, 17 de enero de 2013

De ratones y hombres

wrapimgGUION Y DIBUJOS: Pierre-Alain Bertola
EDITORIAL: Norma
PVP: 16,00 €


Tomo tapa dura, 19 x 26 cm., 120 pags., B/N.

Adaptación de una novela de John Steinbeck. Ahora es cuando me dices que no conoces a este señor, y yo me enfado como un gorrino. Se trata de uno de los escritores más relevantes y representativos de las letras norteamericanas en el siglo XX, poca broma. Entre sus clásicos, además de De ratones y hombres, recomiendo efusivamente Las uvas de la ira, ambientada en el mismo entorno, y ciertos relatos inspirados en los hechos del Rey Arturo y sus nobles caballeros, trabajo inconcluso pero de indispensable descubrimiento.

Ahora, esta novela en cuestión. Los protagonistas son George y Lennie, dos tipos que deambulan de un rancho a otro, en busca de un trabajo malpagado que les proporcione techo y sustento. Son inseparables como hermanos, pero el problema lo tiene Lennie, demasiado grande y demasiado fuerte, y demasiado retardado para su propio bien. No le falta bondad, pero es incapaz de controlarse, lo que desembocará en una tragedia inevitable que terminará con cualquier opción de lograr sus sueños.

Nada que objetar al libro; ahora, la adaptación de Pierre-Alain Bertola. Le reconozco su intención, apuntando algunos de los pasajes más representativos de la novela. Poca profundidad, en cualquier caso, para señalar esos momentos de mayor intensidad. Sus dibujos en acuarela de trazo grueso no ayudan en absoluto, olvidando cualquier opción de recrearse en planos cercanos, obviando la posibilidad de incidir en detallados aspectos de los personajes, sus intenciones marcadas en sus rostros. Por todo ello es una obra de fácil adaptación teatral, pero si no se presta atención a dichos pormenores en el cómic, carece de posibilidades en este medio.

Clara demostración que debemos ser más escrupulosos a la hora de valorar una adaptación literaria. Tenemos a nuestra disposición una valiosa fuente de creación e interpretación, por lo que seremos rigurosos si no se trata con el debido cariño y profesionalidad. Ahora corre a buscar el libro y olvida este álbum, si sabes lo que te conviene.


Valoración: 3,5/10


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La Ultima Historia de los Vengadores

wrapimgGUION: Peter David
DIBUJOS: Ariel Olivetti
EDITORIAL: Panini
PVP: 12,00 €


Tomo tapa dura, 19x28 cm., 104 pag., color. Contiene The Last Avengers Story 1 y 2 USA (1995).

Viniendo de la mano de Peter David (que espero se recupere lo antes posible de su reciente infarto cerebral), un tipo que puso a la altura de los inolvidables a Hulk gracias a su Futuro Imperfecto, cabría esperar una valiente propuesta para narrar la última historia de los Vengadores. Algo de eso hay, tras resistirse a quebrar su razonamiento inicial con un banal combate cruzado, tan propio de los ’90. Claro que de eso a una obra maestra del noveno arte, dista un abismo.

La historia se centra en un futuro descorazonador, en la que los héroes más poderosos de la tierra son una panda de jóvenes indisciplinados, que matan su tiempo jugando a cartas o buscando piojos. Alguien se los cepilla con un petardo nuclear, para obligar a los viejos héroes de siempre a mantener un duelo a muerte.

Así empieza la tarea de Hank Pym de reclutar viejos camaradas que le ayuden en su pelea final. Dará tumbos por todas partes, lo que nos permitirá conocer el destino que les aguardó a muchos superhéroes, o el paradero de los que todavía quedan vivos; en eso básicamente consiste la primera parte de la obra. La segunda son una serie de hostias para rellenar un sinfín de viñetas.

El dibujo corre a cargo de un tal Olivetti, alumno desventajado de Bisley, que consigue evocarnos el deseo de echarlo a patadas y contratar a Alex Ross. La palabra que mejor lo define es “hipertrofiado”, algo que se corresponde y se manifiesta en el total de sus ilustraciones.

Divertida aventura si no se toma demasiado en serio, y permite disfrutar de unas interpretaciones futuras de nuestros héroes de siempre muy agradecidas. Una verdadera lástima el tono de inevitabilidad que se le ha imprimido, algo que lastra lo que podría haberse convertido en un entretenimiento ligero.


Valoración: 4/10



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Una colmena en construcción

wrapimgGUION Y DIBUJOS: Luís Durán
EDITORIAL: Norma
PVP: 25,00 €


Tomo tapa dura, 17 x 24 cm., 392 pag., color.

Cada vez que una novedad de Luís Durán aparece en las librerías, es para mí motivo de regocijo y alegría. Prolífico autor patrio, su cada vez más dilatada carrera artística parece seguir ciertos patrones seculares, que de momento solo comparten él mismo, y los habitantes de su ingente imaginación. A la busca y captura de comprensión, que de manera inevitable me llevará a la iluminación, indago en cada una de sus entregas comiqueras, como autor completo (la mayoría), o mero guionista (la exultante excepción). De momento, la búsqueda es infructuosa, pero el esfuerzo a menudo se ve recompensado con creces.

Y digo a menudo, porque en contadas ocasiones sufro como lector lo que un más llano miembro del vulgo denominaría “coitos interruptus”. Eso es, que justo cuando más espero satisfacción a raudales en mi organismo, las expectativas demuestran ser demasiado optimistas, y permanezco impávido con el libro cerrado, la lectura ya concluida, preguntándome hasta qué punto no seré yo el imbécil. No te molestes en responder.

Tenemos un precioso ejemplar, por fin una lujosa edición a la altura del que está llamado a ser próximo premio nacional del cómic. Norma se ha hecho cargo, como tal vez ninguna otra editorial hubiera sido capaz. El precio no es cuestión baladí, pero entendemos que la calidad del papel, el coloreado adicional, y el grosor del volumen lo justifican. En realidad, resulta barato, aunque haya que imprimir en Singapur, o donde haga falta. O resultaría, si el contenido hubiera sabido estar a la altura.

Cuenta con todos los elementos que han convertido el trabajo de Durán en material digno de elogio: un buen montón de personajes misteriosos, que irán desvelando su sombra a medida que los conozcamos; una trama envuelta en ensoñaciones, recuerdos, nostalgia y pesadumbres, que pesarán en el presente; y por supuesto, el inconfundible estilo gráfico del autor, que provocaba cierto rechazo en sus principios, pero ha sabido encontrar su lugar en nuestro corazón a través de nuestras lánguidas miradas.

Entonces, por qué no ha terminado de ilusionarme, como otros ejemplos previos de Durán? Lo achaco a ese carácter en exceso parsimonioso, que no acaba por conducirme al destino prometido. También a ese divagar entre viñetas, agradable a la vista, pero que cumple ese único objetivo. Si bien puede ser satisfactorio en conjunto cuando se ha disfrutado de la lectura, como ocurre en otros trabajos de este y otros autores (estoy pensando en el maestro Miguelanxo Prado), si no consigue atraparnos con sus promesas nostálgicas quedaremos náufragos de buenas sensaciones.

A pesar de ello, no quiero que se malinterprete, pues he disfrutado de momentos agradables paseando mi mirada sobre las páginas, acariciando las sonrisas y los anhelos de unos personajes con los que podemos identificarnos fácilmente. Por cierto, conozco al tipo que construye la catedral con sus propias manos, y desde Les Fonts no hay tan hermosa vista con tréboles y panales.


Valoración: 5/10


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The Boys #10. Carnicero

wrapimgGUION: Garth Ennis
DIBUJOS: Darick Robertson
EDITORIAL: Norma
PVP: 15,00 €


Tomo tapa blanda, 144 pags., color, tamaño 17x26 cm. Recopila The Boys: Butcher, Baker, Candlestickmaker 1-6 USA (2012).

Poco recorrido le falta a la colección más reciente de Garth Ennis, donde el irreverente guionista da rienda suelta a su parafilia con los héroes en mallas, los tipos que, enfundados en un traje colorido y tras una anónima máscara, perpetran todo tipo de libertinajes permitidos por las más altas esferas. De hecho, ya ha concluido su recorrido en los USA, y ahora estamos a la espera de su publicación en España, que promete no hacerse esperar. Mientras tanto, contamos con otra miniserie especial, donde por fin conocemos el misterioso pasado secreto de el Carnicero, líder del grupo represor conocido como The Boys.

Ejemplo perfecto de narración típica del autor irlandés, donde encontramos los tics y chascarrillos habituales de su carrera profesional. No es un mal tipo, son las circunstancias las que lo han convertido en el monstruo que contemplamos. Aunque, en honor a la verdad, algo feo se ocultaba detrás de esa fachada de buena voluntad, algo terrible que bien pudo permanecer oculto, pero que ha visto la luz en aras a contar una historia provechosa.

Una vez más, contamos con el talento de Darick Robertson en el apartado gráfico, algo que agradece la colección, que pierde simetría cuando su nombre se esfuma de los títulos de crédito. Es más, en ocasiones asoma su mejor versión, la que es capaz de dejarnos pegados a la butaca, y que por sí misma justifica la adquisición del cómic.

Hace mucho tiempo que esta cabecera no me agradaba tanto, y pongo ahora mis expectativas muy altas en la conclusión de la serie, a pesar de las voces discordantes que alcanzan ya mis oidos. Por lo que a mí respecta, una muy buena obra, digna de figurar en un lugar destacado de mis estanterías.

- Uh, Garth Ennis por la línea dos, señor.
- Dile que se vaya a tomar por el culo. Ningún puto británico en Victory Comics.



Valoración: 7,5/10


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Hellblazer. Ciudad de Demonios

wrapimgGUION: Si Spencer
DIBUJOS: Sean Murphy
EDITORIAL: ECC
PVP: 12,50 €


Tomo tapa blanda 128 pgs color. 17,5 x 26,5 cm. Contiene Hellblazer: City of Demons 1-5 USA.

Ultimamente, disfrutamos de una descarada e irreverente versión de nuestro personaje favorito, John Constantine, de la mano de Milligan, en los últimos estertores de la línea de cómics adultos norteamericanos. A partir de elementos icónicos e idolatrados, el guionista inglés ha dado la vuelta al mito, y lo presenta más humano, más viejo, incluso enamorado, antes que el nefasto UDC le meta mano y lo convierta en un Harry Potter que lanza rayos y hechizos por el culo.

De todos modos, y de vez en cuando, conviene evocar al Constantine de siempre, no tan entrado en canas, pero tan bastardo como todos recordamos. Nos gusta verlo metido en líos de los que saldrá incólume, no sin antes salpicar a quienes le rodean. Y en el proceso, mucha sangre y algunas presencias demoniacas, amén de muertos que no lo están tanto, y vivos que tienen los latidos contados.

La propuesta en esta ocasión viene de Si Spencer, arrojando al paso de John unos cuantos monstruos de barrio, recurriendo a elementos innatos del personaje que vuelven para poner en solfa al bastardo inglés. Y nuevamente, la participación del dibujante permite otorgar de la misma esencia al bueno de John: se trata de Sean Murphy, quien demuestra ser un muy apto ilustrador de sus desventuras, recordando las mejores etapas del personaje.

La editorial ECC tiene a bien aderezar el producto final con un relato ilustrado, realizado por Dave Gibbons, y que ya pudimos disfrutar hace algo más de una década, cuando Norma nos proporcionó la tercera entrega de Al filo del invierno. Hay más material inédito bajo la cabecera Hellblazer, y estaría bien conocer los planes editoriales para su recuperación.


Valoración: 7/10


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Freakangels

wrapimgGUION: Warren Ellis
DIBUJOS: Paul Duffield
EDITORIAL: Glenat
PVP: 6 tomos a 15 € c/u son 90,00 €


Seis tomos tapa blanda, 17x26 cm., 144 páginas, color.

Hace 23 años, doce extraños niños nacieron en Inglaterra, exactamente al mismo tiempo. Hace seis años, el mundo terminó. Esta es la historia de lo que sucedió después. Así más o menos se resume el propósito de la obra, que aparece puntualmente en cada entrega, para refrescarnos la memoria y que no perdamos comba con la trama (como si fuera la raiz de un nuevo Genesis, o algo parecido).

Lo que nació para convertirse en un web cómic, o dicho de otro modo, un tebeo pensado para ser leido en soportes digitales, acaba siendo publicado en nuestro país en papel del bueno, por obra y gracia de una editorial en fase de reconstrucción. Eso ha provocado un precio inabarcable para la mayoría de bolsillos que quieran hacerse con la colección, pero al mismo tiempo ha propiciado ofertas suculentas que permiten su adquisición a un coste razonable.

Nace de una idea, otra más, del prolífico Warren Ellis, integrado ahora mismo en universos steam punk, del cual este título es muy representativo. Unos chavales con extraños poderes, huyendo asustados del ejército británico, provocan un cataclismo colosal. Ha transcurrido cierto tiempo, y nuestros protagonistas procuran conservar cierta sensación de sosiego y control en un barrio londinense. Iremos conociendo poco a poco a estos doce compañeros, a través de los ojos de una recién llegada que no venía con muy buenas intenciones.

A pesar de contar con buenos cimientos para narrar una historia, el cómic nunca termina de arraigar en el lector, de interesarlo con sus proyectos y avatares, con lo que cuesta conservar algo más que un buen recuerdo de la obra. Son muchos los personajes que conducen la historia, pero no es un problema de dispersión, pues todos ellos están muy bien personbificados y caracterizados, además de contar con un buen pedazo del pastel argumenta. Creo que el mayor problema de este cómic es su concepción.

Como he indicado, nació para ser disfrutado en la pantalla de tu lector digital. En un tebeo, paseas la mirada por la página, y es tarea de los autores obligarte a concentrar tu atención en cada viñeta, antes de pasar a la siguiente, o bien jugar con ese anhelo de desviar la mirada. El lector marca el tempo y el ritmo de lectura, azuzado o frenado con el arte, pero siempre dispone de la oportunidad de recrearse en la viñeta anterior, o anticipar la posterior; es precisamente una de las singularidades del noveno arte, y es algo que se desatiende absolutamente en Freakangels.

No solamente padece esta incapacidad artística. La historia en sí, aunque extensa, deja demasiados cabos sueltos, evocando apenas su origen, o su etapa anterior al cataclismo. Son precisamente los distintos trasfondos de los personajes los que yo esperaba explotarían, pero entiendo que los han sacrificado en aras de narra hechos más trascendentes o relevantes en la trama.

Lo mejor sin duda son los minuciosos dibujos de Duffield, tridimensionales los personajes, gracia en el movimiento, gran atención al entorno y los escenarios, y un uso del color pretendidamente apagado, y muy inteligente. Puedo criticar cierta rigidez en algunas ocasiones, y las trampas tradicionales de los ilustradores minuciosos con falta de tiempo para entregar sus trabajos. No obstante, algunas de sus ilustraciones son sencillamente fantásticas.

Me cuesta por tanto no recomendar esta obra, sobretodo al precio actual en tu librería, pero lamento la circunstancia que no han incidido más en una trama tan abierta y apetitosa, dejando una sensación de vacío no llenado en quien escribe esta reseña.


Valoración: 6,5/10



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The League of Extraordinary Gentlemen. Century 1969

wrapimgGUION: Alan Moore
DIBUJOS: Kevin O’Neill
EDITORIAL: Planeta
PVP: 4,95 €


Tomo tapa blanda. 80 pgs color. 17 x 26 cm. Recopila: "The League of Extraordinary Gentlemen Century 1969 TPB" USA.

Mucho tiempo ha permanecido este ejemplar en la pila de lecturas pendientes, sumergido entre los descartes que se iban acumulando todos los meses. Y todo ello, a pesar de las buenas referencias de sus autores, encumbrados hasta las posiciones más elevadas de la iconografía comiquera. Buena parte de la culpa la tiene, os lo aseguro, la última entrega de esta innovadora serie, que llevaba por título Century 1910, y de la cual conservo no muy gratos recuerdos.

Pocas son también las reseñas que me animaban a su lectura, o las fuentes que podrían satisfacer mi curiosidad sobre la misma, algo que me cuesta comprender una vez que me he animado a coger el toro por los cuernos. En efecto, aunque parece haber perdido la estela de genialidad de los dos primeros arcos argumentales, la propuesta sigue siendo efectista y original.

Alan Moore prosigue su tarea de narrarnos a esos esperpénticos personajes que protegen la integridad de Albión y sus habitantes. Los años ’60 corren por las venas de los londinenses, además de no pocas substancias psicotrópicas y alucinógenas. El movimiento hippie campa a sus anchas entre una población ingenua y rebelde, algo que se repite cada tres generaciones. Y a este marco temporal regresa Mina Murray y sus colaboradores, dispuestos a frustrar los planes de entidades demoniacas una vez más.

Se repiten los elementos que hacen famosa esta serie, ya pronta a su conclusión: unos personajes recuperados de la imaginería popular, un entorno inspirado en la mitología euclidiana, y sobretodo, infinidad de referencias, interminables notificaciones a hechos o personajes acaecidos en algún momento de este u otro espacio ficticio, para regocijo del lector. Yo he podido apenas atender a un mísero porcentaje de las mismas, lo que me garantiza futuras relecturas que me proporcionarán el prometido goce de descubrirlas.

No quiero descuidar los dibujos de Kevin O’Neill, un artista que ya logró su cénit hace lustros, dibujando a un tal Marshal Law, y que no ha variado un ápice su técnica desde entonces. Desvincular este proyecto de su nombre se me hace tan disparatado como ilógico, siendo este tal vez su legado a la industria.

Reconciliado con la serie, aspiro a conocer el total de la obra que referencia a esos caballeros extraordinarios, más a unos precios tan competitivos como los que ofrece la editorial Planeta. Y son tantos los huecos que faltan por rellenar, que entiendo tenemos para tanto como Alan Dios Moore quiera prolongar.


Valoración: 7/10


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La Hermandad de la Biblia Perry

wrapimgGUION Y DIBUJOS: Nicholas Gurewitch
EDITORIAL: Astiberri
PVP: 20,00 €


Tomo tapa dura, formato apaisado, 18x22 cm., 152 pag., color.

El mundo de las tiras de prensa tiene sus particulares normas, incluso merecería incluirse en su propio género, más allá de la historieta. Al menos, las que no formen parte de una historia más desarrollada, a través de conectar distintas presentaciones. Vendrían a ser el equivalente gráfico de los microrrelatos literarios.

Dicho esto, me confieso ferviente admirador de las muchas posibilidades que ofrecen esos cuatro dibujos enlazados, ideados para despertar bien una sonrisa, bien un pensamiento con algo más de profundidad que un dedal. Y afortunadamente para los tipos como yo, disponemos de un gran compendio de material clásico, así como talento a mansalva que no deja de aparecer en la forma de nuevas y avezadas propuestas.

No obstante, todos conocemos el verdadero talón de Aquiles de las tiras cómicas: cuando son publicadas en forma de recopilación, padecen el cansancio de la reiteración, el hastío que provoca en el lector pasar páginas para experimentar una y otra vez sensaciones semejantes, que anestesian la parcela del cerebro encargada de provocar satisfacción con cada sorpresa.

Por eso la propuesta de Nicholas Gurewitch me ha gratificado especialmente. Lejos de repetir sus propios esquemas, experimenta y baila con distintos estilos en cada página, dedicando hasta 100 horas por una tira, si lo cree necesario. Además, y lo más importante, señala los aspectos más incómodos y molestos para el lector, obsequiando una retahíla de impactantes sensaciones a cualquiera que se atreva a indagar.

El volumen, de bella factura, incorpora no pocos trabajos descartados para su publicación en diarios o en la red, un material extra que se agradece. Además, incluye una entrevista algo deslucida, pero que servirá para conocer algo más a tan excéntrico creador.


Valoración: 8/10


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