lunes, 29 de agosto de 2011

Un dios entre nosotros

wrapimgGUION: John Arcudi
DIBUJOS: Peter Snejbjerg
EDITORIAL: Norma
PVP: 20,00 €


Tomo tapa dura. 200 pgs color. 18 x 27 cm.

Los hermanos Eric y Hugh, junto a su mejor amigo Sam, forman una alianza inquebrantable. Pasan buena parte de su tiempo libre juntos, y planean las vacaciones unidos, convirtiéndose en todo un ejemplo de familia bien avenida, cofraternizando y compartiendo venturas y pesares.

No obstante, un aciago día, una explosión sacude el edificio de apartamentos donde duerme Eric, proporcionándole superpoderes extraordinarios, tales como invulnerabilidad, superfuerza, supervelocidad… todo el conjunto. Será a partir de entonces cuando se planteará su auténtica naturaleza, y la relación que mantendrá en lo sucesivo con la humanidad.

La trama cumple con el interesante concepto de una criatura con mucho poder, mezclada con el común de los humanos, algo casi tan viejo como la apostilla de “superhéroe”. Peor aún, no tratamos con un extraterrestre o el producto de un mal experimento científico: un accidente desvía la recta moral de un cristiano convencido, y lo conduce por el peor de los caminos.

La apuesta de Arcudi funciona como un marco aceptable, al modo de los primeros Irredeemable de Waid. Falla la translación, la deriva moral que sufre el protagonista, del que conocemos ambos aspectos. Nos afectaría de igual modo al común de los mortales? Afecta la religión a la decisión ética final? Cuestiones que no solamente no se responden, pues apenas quedan presentadas.

El trabajo gráfico de Snejbjerg es mayúsculo, sobretodo cuando da rienda suelta a escenas dantescas e imágenes apocalípticas. Heredero incomprendido en tareas más adultas, resulta igualmente acertado en viñetas anodinas o vacuas, de las que la obra contiene con excesiva profusión.

Otro vistoso ejemplo del mucho daño que un tipo con mallas puede ocasionar en un mundo poco acostumbrado al poder absoluto. Por desgracia, no permanecerá en nuestras memorias por siempre, debido a la ambigüedad que el guionista implica en cada uno de los posibles motivos de la transfiguración ética. Al menos, hemos podido ponernos en el lado de los militares americanos.


Valoración: 6/10


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Un dios entre nosotros

wrapimgGUION: John Arcudi
DIBUJOS: Peter Snejbjerg
EDITORIAL: Norma
PVP: 20,00 €


Tomo tapa dura. 200 pgs color. 18 x 27 cm.

Los hermanos Eric y Hugh, junto a su mejor amigo Sam, forman una alianza inquebrantable. Pasan buena parte de su tiempo libre juntos, y planean las vacaciones unidos, convirtiéndose en todo un ejemplo de familia bien avenida, cofraternizando y compartiendo venturas y pesares.

No obstante, un aciago día, una explosión sacude el edificio de apartamentos donde duerme Eric, proporcionándole superpoderes extraordinarios, tales como invulnerabilidad, superfuerza, supervelocidad… todo el conjunto. Será a partir de entonces cuando se planteará su auténtica naturaleza, y la relación que mantendrá en lo sucesivo con la humanidad.

La trama cumple con el interesante concepto de una criatura con mucho poder, mezclada con el común de los humanos, algo casi tan viejo como la apostilla de “superhéroe”. Peor aún, no tratamos con un extraterrestre o el producto de un mal experimento científico: un accidente desvía la recta moral de un cristiano convencido, y lo conduce por el peor de los caminos.

La apuesta de Arcudi funciona como un marco aceptable, al modo de los primeros Irredeemable de Waid. Falla la translación, la deriva moral que sufre el protagonista, del que conocemos ambos aspectos. Nos afectaría de igual modo al común de los mortales? Afecta la religión a la decisión ética final? Cuestiones que no solamente no se responden, pues apenas quedan presentadas.

El trabajo gráfico de Snejbjerg es mayúsculo, sobretodo cuando da rienda suelta a escenas dantescas e imágenes apocalípticas. Heredero incomprendido en tareas más adultas, resulta igualmente acertado en viñetas anodinas o vacuas, de las que la obra contiene con excesiva profusión.

Otro vistoso ejemplo del mucho daño que un tipo con mallas puede ocasionar en un mundo poco acostumbrado al poder absoluto. Por desgracia, no permanecerá en nuestras memorias por siempre, debido a la ambigüedad que el guionista implica en cada uno de los posibles motivos de la transfiguración ética. Al menos, hemos podido ponernos en el lado de los militares americanos.


Valoración: 6/10


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martes, 23 de agosto de 2011

Agencia de viajes Lemming

wrapimgGUION Y DIBUJOS: José Carlos Fernandes
EDITORIAL: Astiberri
PVP: 20,00 €


Tomo tapa dura, formato apaisado, 24,5x17,5 cm., 136, color.

La lectura de cómics europeos es una asignatura pendiente para muchos de nosotros. Más aún, el conocimiento de su mera existencia supone toda una ordalía para la mayoría. Una modesta exposición en el último Saló del Còmic, mostraba un ejemplo de oferta comiquera en distintos países, y cómo eran representados mediante el noveno arte. Ahora, pregúntate, amigo lector, cuántos autores portugueses conoces.

Siendo Portugal país vecino y compartido de la piel de toro, sorprende el desconocimiento sobre su obra artística, si la hubiere. Y precisamente, José Carlos Fernandes es uno de los más insignes representantes del negocio. Su trabajo en la serie La peor banda del mundo es descomunal, digna de ser depositaria de alabanzas y reconocimiento. Ahora, podemos disfrutar de un nuevo proyecto en Agencia de viajes Lemming.

El asunto germina a partir de la posibilidad de una tira cómica, lectura liviana en los áridos meses estivales, que complementarían un espacio reservado del periódico habitual. El señor Fernandes opta por dos tiras diarias, duplicando su trabajo, no así sus patrocinios. Nos propone diferentes rutas, interesantes destinos para un veraniego desahogo, aportando imaginación y verbo, genialmente interpretado en nuestra lengua por Diego García, en su labor de traductor.

Abro el volumen al azar, y descubro parajes tales como Dulia, una ciudad amorfa y falta de interés; Manzil, una ciudad inhóspita que no para de crecer como un tumor; o Hrabal, donde van a parar todo tipo de papeles para su reutilización: archivos muertos del ministerio de la salud, colecciones de cromos de héroes del trabajo socialista, recordatorios del tribunal administrativo de Ottawa, atestados médicos…

Una muy interesante propuesta que recoge el incesante afluente de imaginación que aporta el autor, condimentado con un excelso manejo de la palabra y la redacción, que buena falta nos hace. Todo ello impreso en papel de al menos 280 gramos por metro cuadrado, e inyectado en tinta sepia, lo que invita a saborear la obra como un pedazo de historia dignificada.

El vértigo no es el miedo al abismo y la caída. Ese miedo no es sino un mero instinto de autoconservación inherente a todos los seres vivos.
El vértigo es la atracción por el abismo y la caída. Es exclusiva del ser humano!



Valoración: 7/10


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sábado, 13 de agosto de 2011

The Authority. El Año Perdido

wrapimgGUION: Grant Morrison, Keith Giffen, J.M. DeMatteis
DIBUJOS: VVAA
EDITORIAL: Norma
PVP: 26,00 €


Tomo 288 pgs color, tamaño 17x26 cm. Recopila The Authority: The Lost Year 1-12 USA

Entre los muchos proyectos que protagonizan los Authority, uno de esos grupos de superhéroes cabecera de la última década, encontramos interesantes trabajos producto de la ingente imaginación de sus guionistas. Son ellos quienes han imprimido su personalidad en las páginas publicadas, y han elevado o condenado, según los casos, dichos intentos entre los aficionados.

Durante un año de publicación, doce entregas mensuales, el transporte excepcional de los Authority, una entidad viva que se desplaza por la sangría de modo más o menos autónomo, se ha averiado. Ello les desplaza a alternativas realidades, con lo que podrán conocer de primera mano cómo es el mundo, o los mundos, bajo las distintas posibilidades que un equipo creativo puede inspirar.

El siempre osado Grant Morrison encabeza la iniciativa, acomodado en el inconfundible arte de, nada menos, que Gene Ha. Geniales los dos primeros cómics, que dan una idea de lo que podría llegar a ser, en el universo posible en el que los días duran 58 horas y los artistas gozan de tiempos de entrega flexibles.

Pero nada bueno dura siempre, y el relevo lo toma Keith Giffen, en compañía esporádica de DeMatteis, capaces ambos de convertir cualquier cosa en una autoparodia perpetua, que mucho recuerda a su colección Héroe al cuadrado. El baile de ilustradores es entonces mareante, pero quiero apuntar el desconocido aporte de Darick Robertson, la sorprendente incorporación de Brandon Badeaux, y la ligera labor de Kevin Nowlan.

Una sucesión inacabable y simpática de posibilidades alternativas, un experimento divertido con las infinitas implicaciones de un grupo de superhumanos en el equilibrio mundial. Puede parecer fútil, pero debo admitir que he disfrutado el juego que nos proponen en la idea inicial, caóticamente interpretado y presentado. No deja de ser, a mi modo de ver, una solución comprimida y entusiasta de lo que puede ofrecer la serie.


Valoración: 6,5/10



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viernes, 12 de agosto de 2011

WildCats de Alan Moore

wrapimgGUION: Alan Moore
DIBUJOS: VVAA
EDITORIAL: Norma
PVP: 28,00 €


Tapa dura, tamaño 17 x 26 cm. Tomo 392 páginas, color. Recopila WidCATS I #21-34 y 50. 2ª Edición.

Mucho tiempo he dejado transcurrir, y mucha lluvia he permitido caer, antes de decidirme por este título de la línea Wildstorm. Porque, a pesar que cuenta con el nombre de Alan Moore en la cabecera, poca participación real augura, y como he podido comprobar, acierto en mis previsiones plenamente. Lejos del talento que nos permitió disfrutar de Watchmen o V for Vendetta, se acerca más a los requerimientos mercantiles de otras empresas con su presencia de muletilla, al modo del Angela de la editorial Image.

Y eso que, de buenas a primeras, el asunto no pinta mal en absoluto. Ya me encuentro con la colección rodada, y los personajes son auténticos desconocidos para mi analfabetismo cultural en mallas. Más cuando descubro que hay un equipo original, perdido en el espacio, y unos substitutos en la Tierra, relevando las funciones. Vamos por partes.

En una distante galaxia, encuentran el planeta natal de los ángeles, o su equivalente en tebeos, que han vencido en su eterna lid contra los demonios, o su parejo comiquero. Como sea, la quimera resulta menos idílica de lo que podría parecer, algo que nuestros amigos descubrirán por las malas, dejando buena parte de sí mismos por el camino.

En la Tierra han quedado huérfanos de estos héroes, y se modela una alternativa con otros componentes. Entre sus filas, aceptamos a Tao, un villano reformado, que se postula como una de las mejores personalidades que he tenido el gusto de conocer. Sus ardides y tejemanejas acaban siendo los más sorprendente de este volumen.

En algún momento de estas casi 400 páginas, creo que cuando se unen ambas trayectorias dramáticas, todo se va al garete, y se convierte en el típico panfleto donde desfilan supertipos con trajes ajustados, y fogosas y neumáticas jóvenes con promesas en cada gesto y postura. La típica basura que justifica títulos como The Boys en la industria.

En el apartado gráfico, desfilan toda una serie de interventores, todos profesionales del medio y con la cara muy dura. No faltan las trampas y trucos del medio que permiten entregar los bocetos a tiempo, pero cuando el baile de actores los hace a todos partícipes, no se justifican estas estratagemas. Destaco entre todos a Travis Charest, por ser el más asiduo, y a Jim Lee, pues su nombre ayuda en las ventas, pero su trabajo roza la repugnancia.

Poco interés en analizar el entorno de estos héroes, sus proezas y sus vicisitudes. Al menos me han proporcionado un rato exiguo de entretenimiento, y me han permitido conocer en mayor profundidad ese universo plagado de héroes metanfetaminados y supervitaminados.


Valoración: 3,5/10



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martes, 2 de agosto de 2011

En mis ojos

wrapimgGUION Y DIBUJOS: Bastien Vivès
EDITORIAL: Diabolo
PVP: 17,95 €


Tomo tapa dura. 134 pgs color. 19,5 x 28 cm.

Recientemente, advertía la existencia de Bastien Vivès en el mismo universo que yo. Al parecer, un autor europeo del montón, uno más que abastece las estanterías para lectores gafapastas, presuntuosos estirados muy por encima de la media intelectual que abunda en las tiendas de tebeos, más pendientes de tipos musculosos en mallas y tipas pechugonas con los labios entreabiertos y la mirada vidriosa, que en introducir algo coherente en esa sustancia gris que flota en el interior de sus cráneos.

Mencionaba a Vivès, y lo hacía en relación a una de sus obras editadas en castellano, y que supo conectar con el hambriento devorador de maravillas que anida en nuestra dormida psique: El gusto del cloro. Ese despertar me ha impulsado a leer otra de sus garantes, En mis ojos, y en esas estamos.

La protagonista es, nuevamente, una joven. Tan hermosa como sencilla, la ignorancia de su propia sensualidad la convierte en objeto de deseo y codicia, que se plasmará en todas las viñetas. Olvida conocer su nombre, pues engloba en su forma a todas aquellas chicas que nos miraban de reojo, con esa sonrisa pícara y ese gesto casual, tan excitante y perturbador. Solamente he hallado similar devoción por el sexo femenino en autores como Arlerí o Boilet; ahora incorporamos un nuevo apellido a la selección.

Buena parte del mérito del autor, es su interés altruista en ofrecer una enorme selección de técnicas narrativas, y aplicarlas de manera decisiva en la historia. En esta ocasión, partimos desde el punto de vista subjetivo, en primera persona, del participante en toda la acción. Vemos lo que él ve, oímos lo que él oye; pero debemos ser nosotros los que pronunciemos las palabras, guiados por la respuesta de nuestro entorno.

Lo mejor, insisto, es esa relación que establecemos con la Venus de nuestro corazón, disfrazada de una estudiante pelirroja con muchos pájaros en la cabeza, que nos mira a los ojos, sonríe, y desborda nuestra razón. Lo peor, una vez más, es una desorientación narrativa, producto del modo de hacer del artista, que lejos de atar cabos y cerrar argumentos, permite que sea el lector quien rellene esos espacios vacíos; y eso, amigos míos, es una habilidad lectiva que solamente adquieren algunos gafapastas de nivel.


Valoración: 6/10



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