GUION: Ange
DIBUJOS: Pierre Alary
EDITORIAL: Dibbuks
PVP: 16,90 €
Tomo 144 pgs color, tapa blanda, tamaño 17x24 cm. Publicado en Francia por Soleil, donde es uno de sus títulos más destacables.
Aquí tenemos entre manos otro ejemplo de cómic europeo, inspirado en las interminables fuentes de inspiración que suponen el género de la capa y la espada. Caballerosidad y duelos de esgrima, saltos a través de los tejados de una decadente capital parisina, un rey de los franceses, y un rey de los mendigos.
En el mundillo del cómic, la temática ha sido ya convenientemente explotada. La Mazmorra Amanecer sorprendió con un punto de vista original donde los haya, pero aparcado a un lado. El Escorpión atinó con una trama más o menos compleja, pero explotando todos los condicionantes habidos y por haber. Incluso De Capa y Colmillos, innovando con un dudoso sentido del humor, y el uso discriminado de personajes antropomórficos, siempre tan práctico.
La incorporación de este título, Belladona, es la protagonista, una joven. De pasado misterioso, pero involucrada en el aprendizaje de técnicas de combate exóticas en la India, forma parte de un comprometido contubernio para defender la vida del rey Luis ante las continuas amenazas de muerte.
Ange construye una complicada trama, forzada en algunos extremos, algo necesario para encajar un personaje algo anacrónico para el entorno. Su mayor defecto, no saber manejar las herramientas que proporciona el medio para narrar su historia. El cómic, con su infinito potencial, debe ser convenientemente explotado; intentar traducir un buen planteamiento literario o cinematográfico a este medio, requiere cierta adaptabilidad, y el guionista peca de torpeza con su esfuerzo.
Alary es el encargado de ilustrar la historia, con cierta tendencia al cartoon, pero con graves deficiencias en el acabado. Marini puede ser o no del agrado de los lectores, pero se le reconoce una portentosa técnica, y un espectacular e impactante trabajo. Nada de eso hay en este cómic, más al contrario: paisajes difuminados, fondos inacabados, turbio decorado para enmarcar una trama que requiere más perspectiva.
Lejos de ser el maravilloso producto que nos prometen, tampoco cae en la indiferencia, gracias a una conclusión intrépida, con ritmo y con sorpresa. No puede equilibrar, sin embargo, el hecho de contar con personalidades poco creibles, y actitudes que nunca se deciden a razonar, que suceden a pesar de la lógica de la trama. Triste traspiés.
Valoración: 4,5/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario