jueves, 25 de julio de 2013

Asilo Arkham Locura

wrapimgGUION Y DIBUJOS: Sam Kieth
EDITORIAL: Planeta
PVP: 13,95 €


Edición original: Arkham Asylum: Madness USA. Fecha de edición: febrero de 2011. Formato: Libro cartoné, 104 págs. a color.

La labor de Sam Kieth siempre me ha resultado un tanto contradictoria, entiendo como a la mayoría de aficionados a la viñeta. Su muy particular estilo, que me atrevería a definir como realismo distorsionado, determinó colecciones de capital como The Sandman, u otros trabajos de menor envergadura, pero de mayor intensidad, como Epicurus. De cualquier manera, su trabajo como autor completo nunca satisface a todos por igual, dejando una sensación de ocasión desperdiciada tras la lectura de sus obras, sobretodo los últimos lustros.

Es exactamente esa impresión la que resta tras la lectura de Asilo Arkham Locura. Las referencias a la memoria del lector trascienden uno de esos ejemplares incólumes en su biblioteca particular, Arkham Asylum. Y la necesidad de comparar ambos trabajos afecta de manera inevitablemente negativa al ejemplar que ahora tenemos entre manos.

Un día laborable entre las paredes del centro psiquiátrico más popular de Gotham, eso mismo nos ofrece. La protagoniza una de las enfermeras titulares de la institución, una joven madre con los sueños y las esperanzas todavía intactas, antes de corromperse con el paso de los años y el acúmulo de decepciones que la vida otorga a espuertas. Así aprenderemos algo del día a día que se vive en el basto edificio, y sus ocupantes, ninguno voluntario.

Con las posibilidades que promete casi deberíamos esperar algo que roce una obra maestra, más con el talento innato del artista. Mas por desgracia, el autor es incapaz de indagar en la más profunda verdad que envuelve a todos los residentes, y por ende desvelar la naturaleza de sus acciones. Algo debo reconocerle, y es su capacidad para generar un ambiente asfixiante, que logra prolongar buena parte del relato, y sobrecoge al lector que decide sumergirse en la trama.

Puede que, en efecto, sufra las carencias de tan insigne y relevante artista. Y puede que no sepa exprimir las enormes posibilidades que ofrecen todos y cada uno de los internos de Arkham. Pero debo admitir el esfuerzo que, en ocasiones, bien dirigido y perpetrado, puede provocar cierto desasosiego en el receptor. Y sobretodo, para los fans acérrimos de Kieth, que me consta perduran en su adoración.


Valoración: 5,5/10


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