GUION: Hubert
DIBUJOS: Kerascoët
EDITORIAL: Planeta
PVP: 10,95 €
Álbum 96 pgs color, tapa dura, tamaño 17,5x24,5 cm.
Estamos en los festivos años ’30, compartiendo la inocencia previa a la Guerra, cuando todavía era posible un futuro sin horrores. Y estamos en París, junto con Berlín la capital del mundo, pero con un aire de decadencia que envuelve ese particular estilo de vida, irrecuperable por siempre.
Blanche es una joven humilde que sirve de criada en una casa bien, pero su mundo se convulsiona con el asesinato de su hermana. Determinada a que cumplan su justo castigo, sus indagaciones la conducirán a uno de los protíbulos más prestigiosos de la ciudad.
Hubert realiza un estudio simpático de un tiempo y un lugar que se prestan a ello. Incluso la corrupción y la degradación se visten de esa melancólica nostalgia por algo que nunca hemos vivido, pero que se vislumbra con facilidad en trabajos orientados a ensalzar el atractivo y la astucia de una mujer que se supera a sí misma, y al hostil entorno. Las similitudes con la artera Blanc-Sec no parecen casuales.
El mayor atractivo del álbum lo introduce el artista, Kerascoët, quien transfiere tanto la cándida inocencia como la firme determinación a un personaje principal a quien no le pesa en absoluto el protagonismo. Sus consortes en la trama no le van a la zaga, y dibuja con garbo toda una serie de prototipos, más que personajes.
Entretenida, a veces incluso amena aventura detectivesca con chicas majas y dispuestas como protagonistas. Ignoro si el lector avezado tendrá interés en algo más que no sea ver jovencitas de buen ver en pleno acto, pero de eso abunda, y además sin olvidar un característico y sano sentido del humor.
Valoración: 6/10
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