GUION: Gwen de Bonneval
DIBUJOS: Matthieu Bonhomme
EDITORIAL: Norma
PVP: 29,00 €
Tomo tapa dura apaisado con sobrecubierta. 292 pgs b/n. 21,5 x 17 cm.
Gwen de Bonneval ha planteado esta obra en modo semi fantástico, conformando el entorno cotidiano del burgo medieval para enmarcar un planteamiento a dos bandas. Por un lado, el enfrentamiento habitual en las clases altas de la Edad Media, una conspiración urdida para obtener el beneficio del cargo territorial. Por otro lado, una onírica aventura a la búsqueda de esquivas respuestas, siempre con la herrumbre de la magia como conductora de la trama.
El doble planteamiento generado para vivificar la historia, repercute de modo positivo a la hora de otorgar un respiro al guionista, pero oprime la condición de imagen fantástica del cómic. La transición es brusca, o mejor dicho abrupta, y no engaña al lector el carácter independiente de ambas facetas.
Un valiente chaval es protagonista, y empujado por el ímpetu y la iniciativa de su hermana mayor, inicia la búsqueda de su desaparecido progenitor. Sobra mencionar las intendencias de un rival sobre el derecho de sus tierras, que en nada ayudarán a su empresa. Pero no será en este mundo donde nuestro joven protagonista tendrá ocasión de explorar límites e indagar sobre su padre, y será en ese otro posible donde darán rienda suelta a la imaginería propia de entusiastas recreaciones.
Sin embargo, este libro está orientado a mostrar el talento de Bonhomme, ilustrador que aquí despliega un saber exquisito sobre el uso del lápiz, directo sobre papel sin esbozo previo, y sin tinta adicional que pudiere confundir el resultado final. Me ha sorprendido encontrar en este autor dicha habilidad, que le había pasado por alto en labores anteriores. Y es, con mucho, lo mejor del álbum.
Valoración: 5/10
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