GUION: Steve Niles, Adam Jones
DIBUJOS: Tom Mandrake
EDITORIAL: Norma
PVP: 15,00 €
Tomo tapa blanda. 144 pgs color. 17 x 26 cm. Colección Made in Hell #115. Contiene 30 Days of Night / The X-Files 1 al 6 USA (2010).
Por un lado, tenemos a los míticos agentes del FBI, Mulder y Scully, implicados en la resolución de un caso sobrenatural, atrapados en el ciclo sin fin que les supone su “modus operandi” (yo creo, sí creo). Aunque ya hace años que abandonaron la pequeña pantalla, siempre hay tiempo de recuperar los personajes para vender unos cuantos kilos de papel.
Por otro lado, tenemos a los vampiros que popularizaron Niles y Templesmith, y que han dado lugar a una de esas sagas interminables, que se fagocitan a sí mismas, y parecen elaboradas para generar ingentes cantidades de dinero. Me refiero a la colección conocida como 30 Días de Noche, y que tienen a unos monstruosos vampiros de protagonistas, allá en el círculo ártico.
No es un anatema involucrar ambos enfoques en un mismo proyecto, y por fin han decidido dar el paso. Al parecer, unos extraños crímenes han llamado la atención de la agencia gubernamental norteamericana, que envía a sus secuaces de lo marginal para resolver el enigma de los asesinatos, crueles y bestiales. Pero claro, unos chupasangres esperan su oportunidad, y se enfrentarán a la incredulidad patológica de la chica, así como a la cara de palo del héroe.
La idea, aunque parezca mentira, requiere de la participación de dos cerebros trabajando de manera conjunta, y han escogido a un tal Adam Jones para que comparta culpas con el señor Niles, ya acostumbrado a críticas desfavorables. Sorprende comprobar cómo pueden ocupar tantas viñetas con una trama vacua, algo que no es tan fácil como parece.
Recuerdo que, cuando el señor Adlard (ahora caminando con los muertos) fue criticado por su grafismo en la vieja colección X-Files, respondió imprecando a los sufridos lectores de ser degustadores de telenovelas baratas, ya que buscaban un parecido físico entre los personajes del cómic y los de la serie televisiva. El tiempo le dio la razón, pero Tom Mandrake ha optado por la vía fácil: fotocopiar el careto de los actores, y crear un fotomontaje de fondos oscuros o nevados. Espero que su casera lo eche de casa, no se merece menos.
Aunque el formato de la edición es original y aceptable, el contenido del cómic echa por tierra cualquier buen propósito que pudiera albergar la idea original. Lo próximo que hará Niles será cruzar sus criaturas con Hitler, Holmes, o Julio César, pero sin lograr ningún efecto narrativo interesante. Es capaz de eso y de más.
Valoración: 3/10
DIBUJOS: Tom Mandrake
EDITORIAL: Norma
PVP: 15,00 €
Tomo tapa blanda. 144 pgs color. 17 x 26 cm. Colección Made in Hell #115. Contiene 30 Days of Night / The X-Files 1 al 6 USA (2010).
Por un lado, tenemos a los míticos agentes del FBI, Mulder y Scully, implicados en la resolución de un caso sobrenatural, atrapados en el ciclo sin fin que les supone su “modus operandi” (yo creo, sí creo). Aunque ya hace años que abandonaron la pequeña pantalla, siempre hay tiempo de recuperar los personajes para vender unos cuantos kilos de papel.
Por otro lado, tenemos a los vampiros que popularizaron Niles y Templesmith, y que han dado lugar a una de esas sagas interminables, que se fagocitan a sí mismas, y parecen elaboradas para generar ingentes cantidades de dinero. Me refiero a la colección conocida como 30 Días de Noche, y que tienen a unos monstruosos vampiros de protagonistas, allá en el círculo ártico.
No es un anatema involucrar ambos enfoques en un mismo proyecto, y por fin han decidido dar el paso. Al parecer, unos extraños crímenes han llamado la atención de la agencia gubernamental norteamericana, que envía a sus secuaces de lo marginal para resolver el enigma de los asesinatos, crueles y bestiales. Pero claro, unos chupasangres esperan su oportunidad, y se enfrentarán a la incredulidad patológica de la chica, así como a la cara de palo del héroe.
La idea, aunque parezca mentira, requiere de la participación de dos cerebros trabajando de manera conjunta, y han escogido a un tal Adam Jones para que comparta culpas con el señor Niles, ya acostumbrado a críticas desfavorables. Sorprende comprobar cómo pueden ocupar tantas viñetas con una trama vacua, algo que no es tan fácil como parece.
Recuerdo que, cuando el señor Adlard (ahora caminando con los muertos) fue criticado por su grafismo en la vieja colección X-Files, respondió imprecando a los sufridos lectores de ser degustadores de telenovelas baratas, ya que buscaban un parecido físico entre los personajes del cómic y los de la serie televisiva. El tiempo le dio la razón, pero Tom Mandrake ha optado por la vía fácil: fotocopiar el careto de los actores, y crear un fotomontaje de fondos oscuros o nevados. Espero que su casera lo eche de casa, no se merece menos.
Aunque el formato de la edición es original y aceptable, el contenido del cómic echa por tierra cualquier buen propósito que pudiera albergar la idea original. Lo próximo que hará Niles será cruzar sus criaturas con Hitler, Holmes, o Julio César, pero sin lograr ningún efecto narrativo interesante. Es capaz de eso y de más.
Valoración: 3/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario