El hijo del ogro

GUION Y DIBUJOS: Grégory Mardon
EDITORIAL: La Cúpula
PVP: 15,00 €


Tomo tapa dura. 72 pgs b/n. 17,5 x 25 cm.

No soy especial entusiasta de la obra de Mardon, a pesar de su reputado talento. Tal vez se deba a esa difícil interpretación a que se presta una pátina de personal creación, un reflejo de su misma persona en todo su trabajo. De cualquier modo, a mí me cuesta conectar con esa actitud, esa manera de hacer ciertamente característica.

En esta ocasión, aborda una temática inaudita en sus haceres, ubicando la trama de su narración en plena Edad Media, con sus señores, sus castillos, sus guerras y miserias. Ha logrado que añore a Luis Durán.

El protagonista es un crío que se mete en un problema demasiado grande para él, lo que acabará con la vida de su madre. De manera funesta, acaba convertido en mercenario, demostrando una capacidad para tal labor fuera de lo común, prosperando incluso.

Nada más se puede convenir tras la lectura de este libro, excepto la paradójica conclusión, que cierra sabia y mágicamente el círculo iniciado por los crueles dioses que rigen nuestros destinos. Así, en tres capítulos, narrando episodios trascendentes en la vida del protagonista, cubre los periodos dignos de ser mencionados, concluyendo una metafórica fábula que incide a la reflexión.

Sabia utilización del dibujo al servicio de la narración, demostrando además una sorprendente técnica secuencial. Austeros ambientes bien detallados, pero sin cargar nunca la página. Probablemente, esta sencilla historia puede acabar convertida en mi favorita de este autor, por lo que puedo concederle cierto crédito. Acentuar también la edición, que no padece las carencias habituales últimamente en las librerías.


Valoración: 6/10