Siete Guerreras

GUION: Michaël Le Galli
DIBUJOS: Francis Manapul
EDITORIAL: Planeta
PVP: 8,95 €


Album 56 pgs color, tapa dura, tamaño 20,5x28 cm.

Como un reloj, acudo puntual a mi cita con esta colección, de la que me he propuesto reseñar una entrega cada mes, tanto tiempo como requiera para completarla. Para los despistados, deben saber que Siete es una serie en la que cada tomo está realizado por un equipo artístico completamente distinto, y cuya única premisa es simple: siete personajes deben acometer una misión en principio imposible.

Lamentablemente, lo que se vaticinaba ha acontecido, y me he encontrado con la peor de las entregas de la colección (al menos, eso espero). El marco histórico es el siglo VI, y el lugar, el desierto libio. Bizantinos y persas han creado un devastador ejército, que amenaza las puertas de un pequeño pero próspero reino. Están preparados para soportar el asedio, pero la reina decide confiar la vida de su único hijo (ya mozo) a siete guerreras sármatas, de reputación aguerrida, para ponerlo a salvo de posibles incidentes.

El reto más difícil que afrontan los guionistas en este proyecto, es cómo presentar siete personajes, y otorgarles rápidamente cierto relieve, alguna personalidad, antes de meterlos en un berenjenal, y que nos sintamos empáticamente comprometidos con su suerte. Michaël Le Galli hace lo más fácil que se le ocurre: siete pequeñas viñetas y algún epíteto para cada chica, que de todos modos resulta intrascendente en el resultado último. Por lo demás, una aventura sin chicha, en la que van pereciendo las muchachas sin que nos sintamos en absoluto entristecidos. Tan solo una sorpresa dramática en la conclusión, que cualquier lector con algo de malicia ya vaticina desde las primeras páginas.

El dibujo de Manapul es muy colorido, demasiado, y perdemos la oportunidad de gozar con ilustraciones de hermosas jóvenes en posturas comprometidas, un talento que aparentemente se encontraba en el código genético de cualquier ilustrador europeo. El estilo es demasiado cercano al manga para poder pertenecer a esa categoría.

Un bache en el trayecto, que se preveía inevitable dado su carácter innovador y atrevido. Lo curioso es que muchos elevan este ejemplar a uno de los mejores de toda la colección, lo que demuestra que el lector de tebeos no tiene criterio, y que yo acumulo mucha pasta en mis gafas de leer.


Valoración: 3,5/10