El coche de Intisar

GUION: Pedro Riera
DIBUJOS: Nacho Casanova
EDITORIAL: Glenat
PVP: 16,95 €


Tomo tapa blanda, 208 pag., bitono.

Leer cómics es una actividad lúdica, que permite disfrutar del tiempo libre disponible, cada vez más elusivo. Pero sirve además para aprender cosas de otros lugares, de otras gentes que nunca conoceremos personalmente, y me refiero a algo más relevante que una guía de viaje. Ejemplos de este material abundan, y los encontrarás en la obra de Delisle, o en álbumes concienzudos como El Fotógrafo, por poner un par de ejemplos significativos.

Pedro Riera ha realizado algún viaje al Yemen, país desértico del medio Oriente, influenciado por la península arábiga. Junto a su mujer, logró recopilar un buen montón de anécdotas e historias interesantes, protagonizadas por mujeres yemeníes. Allí, su papel en la sociedad se limita al de un pepinillo en un supermercado; son un cero a la izquierda, una nulidad apartada por el entorno, desde ambos sexos.

Con ese material, convenientemente tamizado y tratado, ha logrado una trama centrada en una joven liberal, a la que le suceden no pocos infortunios, derivados la mayoría del mezquino trato que sufren las mujeres a manos de los varones. El libro se fundamenta en una base: cuando alguien obtiene poder sobre otra persona, ese poder es usado de manera abusiva, y provoca dolor. Estaría de acuerdo si se pudiera extrapolar ese axioma a cualquier relación interpersonal, pero parece que solamente puede aplicarse hacia y para las mujeres, desde los hombres.

Al final, resulta que el Yemen es un país subdesarrollado socialmente, por culpa, en esencia, de una religión utilizada (como todas), para controlar y manipular a las personas (mejor convencidas que forzadas). Una población incapaz de entender el concepto de libertad de expresión, más cerca del fanatismo norcoreano que del cacareado compromiso de igualdad occidental. Difícil cambiar las cosas desde dentro, pero ojo, no digo que aquí hagamos las cosas mejor.

Los dibujos de Nacho Casanova son marca de la casa, y su mano se advierte en cada viñeta. Un trazo tembloroso al que se le coge cariño, con una limpieza que se ha convertido en habitual en su obra. Desde aquí recomiendo encarecidamente sus tres álbumes de Autobiografía No Autorizada, donde es autor completo y echa el resto.

Aprendemos algo de nuestras experiencias, y si somos afortunados e inteligentes, también de experiencias ajenas. Una gratis, es que si eres mujer, no puedes caminar por algunos sitios si no ocultas tu rostro, si no te humillas ante otras personas por el hecho que se peinan las barbas. Puede que aquí hagamos muchas cosas muy mal, pero hay acciones que avergonzarían un pueblo, y si soy intolerante por pensarlo, me declaro culpable.


Valoración: 6/10