GUION: Duane Swierczynski
DIBUJOS: Jason Pearson
EDITORIAL: Panini
PVP: 10,00 €
Tomo tapa blanda, 96 paginas, color. Contiene Deadpool: Wade Wilson’s War 1-4 USA.
En los últimos meses, y gracias a la mediación de un amigo también aficionado a los tebeos, he podido leer la práctica totalidad de la obra protagonizada por Deadpool editada en nuestro país. Llegado a este punto, quería escribir una reseña como breve homenaje a esta etapa de libertinaje intelectual, y a tal efecto me he dicidido por este tomo en particular.
El tal Masacre es un Arma-X, un experimento fallido del gobierno, interesado en crear un arma humana muy por encima de la media nacional. Antecesor o no de Lobezno (yo también he visto la película), tiene más o menos los mismos defectos: si bien goza de un factor regenerativo extraordinario, el proceso ha tocado algo que no debía dentro de su cabeza, y ahora es algo parecido a un esquizofrénico capaz de atravesar la cuarta barrera, lo que lo etiqueta como insano mental en las páginas de un tebeo.
Este cómic en particular, hace referencia a la película del mismo nombre, La Guerra de Wade Wilson, gracias a la casualidad de compartir nombre con el tipo dentro de la máscara. Feliz coincidencia que permite la publicación de unos cuantos papeles ilustrados y grapados para su venta. No he visto la peli, por cierto.
Duane Swierczynski escribe una historia banal para esta ocasión, en la línea de otras aventuras que disputado el héroe en el pasado, en realidades alternativas, con una cabeza zombi, o vendido al mejor postor habitual. La diferencia fundamental, y el motivo por el que ubico este cómic muy por encima del resto, es la dualidad entre ficción y realidad que se disputa la mente de WW, sin olvidar que leemos un relato producto de su imaginación, verdad? Juega con posibilidades dentro de la locura, y ninguna de ellas es menos real que cualquier otra.
El dibujo corre a cargo de Jason Pearson, un currante de la editorial con cierto recorrido en la misma, que ya tiene la mano rota dibujando al psicópata arlequinado. Todo parece demasiado estúpido, hasta que difumina con grises un mundo real mucho más horrible que las matanzas cotidianas de los tebeos.
Por todo ello, reivindico a un personaje tan interesante como es Deadpool, siempre insistiendo en relacionar sus andanzas con la cultura pop, y transmitir homenajes en cada diálogo o escena. Si la editorial no lo erosiona en exceso con su interés recaudatorio, podemos tener, yo también lo creo, una joya en ciernes.
Valoración: 5,5/10
DIBUJOS: Jason Pearson
EDITORIAL: Panini
PVP: 10,00 €
Tomo tapa blanda, 96 paginas, color. Contiene Deadpool: Wade Wilson’s War 1-4 USA.
En los últimos meses, y gracias a la mediación de un amigo también aficionado a los tebeos, he podido leer la práctica totalidad de la obra protagonizada por Deadpool editada en nuestro país. Llegado a este punto, quería escribir una reseña como breve homenaje a esta etapa de libertinaje intelectual, y a tal efecto me he dicidido por este tomo en particular.
El tal Masacre es un Arma-X, un experimento fallido del gobierno, interesado en crear un arma humana muy por encima de la media nacional. Antecesor o no de Lobezno (yo también he visto la película), tiene más o menos los mismos defectos: si bien goza de un factor regenerativo extraordinario, el proceso ha tocado algo que no debía dentro de su cabeza, y ahora es algo parecido a un esquizofrénico capaz de atravesar la cuarta barrera, lo que lo etiqueta como insano mental en las páginas de un tebeo.
Este cómic en particular, hace referencia a la película del mismo nombre, La Guerra de Wade Wilson, gracias a la casualidad de compartir nombre con el tipo dentro de la máscara. Feliz coincidencia que permite la publicación de unos cuantos papeles ilustrados y grapados para su venta. No he visto la peli, por cierto.
Duane Swierczynski escribe una historia banal para esta ocasión, en la línea de otras aventuras que disputado el héroe en el pasado, en realidades alternativas, con una cabeza zombi, o vendido al mejor postor habitual. La diferencia fundamental, y el motivo por el que ubico este cómic muy por encima del resto, es la dualidad entre ficción y realidad que se disputa la mente de WW, sin olvidar que leemos un relato producto de su imaginación, verdad? Juega con posibilidades dentro de la locura, y ninguna de ellas es menos real que cualquier otra.
El dibujo corre a cargo de Jason Pearson, un currante de la editorial con cierto recorrido en la misma, que ya tiene la mano rota dibujando al psicópata arlequinado. Todo parece demasiado estúpido, hasta que difumina con grises un mundo real mucho más horrible que las matanzas cotidianas de los tebeos.
Por todo ello, reivindico a un personaje tan interesante como es Deadpool, siempre insistiendo en relacionar sus andanzas con la cultura pop, y transmitir homenajes en cada diálogo o escena. Si la editorial no lo erosiona en exceso con su interés recaudatorio, podemos tener, yo también lo creo, una joya en ciernes.
Valoración: 5,5/10
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